El terrorismo golpea Europa de forma continuada. Hoy ha sido Munich el escenario de muertes de personas inocentes por criminales que han huido después de los tiroteos.
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El terror global
Europa vive tiempos de miedo y pavor. Lo mismo ocurre en el mundo musulmán donde el terrorismo consigue matanzas más numerosas.
El miedo y el desconcierto reinan en las democracias occidentales. Muchos ciudadanos se refugian en partidos de derecha extrema, xenófobos, que aprovechan los ataques perpetrados por extranjeros. Hoy se cumplen cinco años de la matanza de Noruega en la que un ciudadano joven de Oslo dió muerte a 77 conciudadanos.
No se tiene información suficiente sobre la procedencia ideológica de los atacantes de Munich. Una de las primeras filmaciones no oficiales da cuenta de que uno de los terroristas hablaba un alemán perfecto. No se pueden hacer deducciones fiables a estas alturas.
Pero sí que se puede reflexionar sobre los distintos tipos de terrorismo que han golpeado el mundo en los últimos cien años. Lo cuenta Michael Ignatieff en su “Political ethics in an age of terror. The lesser evil”. Califica seis tipos de terrorismo que necesitan cada uno una respuesta política adecuada, una vez que han sido identificados.
1.- El terrorismo insurreccional que intenta derrocar un régimen a través de una revolución.
2.- El terrorismo de lobos solitarios que pretenden defender con la violencia y la muerte una sola causa.
3.- El terrorismo de liberación con el objetivo de derribar un régimen colonial.
4.- El terrorismo separatista que pretende la independencia para grupos étnicos o religiosos que conviven en un mismo estado.
5.- Terrorismo de ocupación que persigue expulsar por la fuerza a los que han conquistado un territorio a través de la guerra o la conquista.
6.- El terrorismo global que no pretende liberar a un grupo particular pero que intenta infringir daño y humillación a un poder global que puede encontrarse en varios países.
Esta última clasificación es la que azota Europa en los últimos meses. Es un terrorismo de carácter global que puede ser perpetrado por formas diversas y por personajes no necesariamente conectados. Los atentados anarquistas de comienzos de siglo pasado era fácilmente descubiertos y llevados ante los tribunales. El problema de hoy es que en muchos caos, los autores de las matanzas no suelen llevarse a los tribunales. O se inmolan o son muertos por la policía. Tiempos muy complejos y de soluciones nada simples.
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