En México
En 2018 muchos electores mejicanos desengañados de los sexenios de Calderón y de Peña Nieto buscaron en López Obrador al candidato capaz de romper con todo lo anterior. Seis años después no parece que sea así. La plataforma MORENA no ha protagonizado la prometida 4ª Transformación, no ha frenado la violencia ni ha actuado contra la corrupción. La sanidad se ha deteriorado, los índices educativos no mejoran y los feminicidios no descienden. En México el campo se muere, más del 36% de la población sufre pobreza y el 9% ha emigrado. En México cada día son asesinadas 11 mujeres y durante el sexenio de López Obrador han fallecido más de 100.000 personas por muerte violenta. ¿Qué es, en realidad, lo que podría llevar a la ciudadanía mexicana a optar por la continuidad? Dicen las encuestas que el 60% de la población está agradecida por los programas sociales de MORENA y fascinada por la elocuencia que el presidente derrocha en sus comparecencias mañaneras. Xotchil Gálvez se enfrenta a todo eso y, no debe olvidarse, a unas élites no demasiado dispuestas a una verdadera transformación del país.