En países como Francia y España, el consumo desciende un 8,4% y un 6,5%, respectivamente.

CONSUMO DE TABACO

La demanda de cigarrillos disminuye año a año en todo el mundo. Pese a su frecuente consumo como un supuesto alivio en situaciones de tensión, parece que ni siquiera la ansiedad y estrés provocados por la pandemia de coronavirus han sido suficientes para devolverle el atractivo a este formato.

Entre las economías incluidas en este gráfico, elaborado con los datos del Statista Consumer Market Outlook, destaca el desplome del consumo de cigarrillos en Sudáfrica. A partir de marzo de 2020, y durante cinco meses, la venta de tabaco en este país fue prohibida como parte de la respuesta a la emergencia sanitaria. Esto contribuyó a que el consumo de cigarrillos disminuyera más de un 40% con respecto a 2019. Brasil, Reino Unido e India — también declarados "zona de preocupación variante" de coronavirus — registraron igualmente una caída de las unidades fumadas por persona, aunque en menor medida.

Independientemente de las medidas aplicadas o de la gravedad de la situación debido a la COVID-19, la popularidad de los cigarrillos bajó incluso en los países donde los puestos de venta de tabaco permanecieron abiertos y donde fueron clasificados como "esenciales". Este fue el caso de Francia y España, países en los que el consumo descendió un 8,4% y un 6,5%, respectivamente.