El aumento de la velocidad de todas las modalidades de ADSL se hará de forma gradual sin cambiar precios y sin necesidad de trámite alguno por parte de los clientes.

LA BATALLA POR LA BANDA ANCHA
Los proveedores de Internet en España han asumido que el mercado y el negocio se
mueven en la banda ancha. Por este motivo, y para hacer frente a las iniciativas
de negocio propuestas por algunos competidores, Telefónica solicitó de la CMT la
ampliación de la velocidad para sus clientes ADSL.

El pasado 22 de julio
la autorización fue concedida, así que Telefónica, respetando los plazos de
ejecución que en ella se especifican, procederá a partir de los últimos días de
septiembre a aumentar la velocidad de todas las modalidades de ADSL sin
modificar su precio y sin necesidad de trámite alguno por parte de los clientes.
La medida también será de aplicación desde entonces a las nuevas altas de ADSL
que se produzcan.

En concreto, las velocidades nominales de descarga de
información pasarán a ser el doble de las actuales, de forma que la modalidad
básica de ADSL se sitúa en los 512 kb/s, al mismo precio que el actual 256 kb/s.
Este aumento no tendrá ningún efecto sobre el resto de las características o
prestaciones adicionales del servicio que el cliente tuviera contratadas
(cuentas de correo, antivirus, servicios de mantenimiento, etc.).


Telefónica de España establecerá un plan gradual de migración a las
nuevas velocidades para los actuales clientes de ADSL, que pretende culminar
antes de que finalice el año. Este proceso de migración no requiere ninguna
actuación sobre el equipamiento del cliente.