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Economía de Chile en recesión técnica

“El Banco Central ha reportado tres meses consecutivos de caídas de actividad económica, lo que se prolongará por, a lo menos, cinco meses más. Esto pone a Chile en el contexto de una recesión técnica donde se registrarán contracciones del consumo privado y de la inversión.

Sin perjuicio de lo anterior, la reapertura de China ha provocado un cambio en las
expectativas y, de hecho, el precio del cobre se ha mantenido por sobre los cuatro dólares por libra en las últimas semanas, lo cual no solo mejora nuestra posición de cuenta corriente, sino también alivia la evolución de los precios de los bienes no transables, situación que generaría las condiciones para que el instituto emisor comience a retirar la política monetaria contractiva durante el segundo trimestre de este año.

Lamentablemente, la evolución de la inversión sigue siendo pesimista, no solo por las
restricciones crediticias, sino también por un sesgo anti inversión que impregna la actual administración. El episodio del proyecto inmobiliario en Ñuñoa es un ejemplo de ello y da cuenta de la actitud negativa que han exhibido las nuevas autoridades en relación a toda nueva iniciativa privada de inversión.

De igual manera, la agenda laboral del Gobierno para este año pone el acento en reducir de manera inflexible la jornada de trabajo e imponer la negociación colectiva obligatoria por rama de actividad económica. Todo esto en medio de una recesión económica que está generando desequilibrios crecientes en el mercado del trabajo, con una informalidad que se acerca paulatinamente a cerca de un tercio de los ocupados.

Sin embargo, el rechazo observado en la Cámara de Diputados a las mociones
parlamentarias del auto préstamo de los fondos previsionales, que no eran más que un
nuevo retiro encubierto, ha generado cierto alivio en el mercado de capitales, después de los traumáticos episodios de los años anteriores, en donde incluso las compañías de
seguros de renta vitalicias fueron obligadas a otorgar un retiro sin que exista fondo de
ahorro alguno. Este cambio de actitud por parte de la actual administración, otrora
impulsores de los retiros, ha permitido una leve trayectoria a la baja de los créditos
hipotecarios, sin perjuicio de que aún son tasas que duplican lo observado a mediados del 2019.

Iniciamos de esta manera el año 2023, un año de recesión, donde estará presente la
tentación de ayudas sociales ante la mala situación de la economía. Es por ello que el
equipo económico del Gobierno tiene el desafío de mantenerse firme ante presiones
populistas, de manera tal que en 2024 se vuelva a crecer de manera sostenible.”

El Informe de Coyuntura Económica ,elaborado por el Instituto Libertad y Desarrollo advierte que en 2023, año de recesión, el equipo económico del Gobierno tiene el desafío de mantenerse firme ante presiones populistas, de manera tal que en 2024 se vuelva a crecer de manera sostenible. En el enlace anterior, el informe completo.

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