AGENCIAS/EDE.- Los altos mandos militares de EEUU no enviarán más tropas a Afganistán hasta tener una nueva estrategia para acabar con los terroristas talibanes y de Al-Qaeda. La solicitud del comandante de la ISAF, quien advirtió de la urgencia de nuevos despliegues para no perder la guerra, tampoco ha sido secundada por Obama. El presidente quiere un plan “que vaya a funcionar”.

MUNDO/ Obama quiere certidumbre

De acuerdo con el periódico The Wall Street Journal, el Pentágono ha pedido al comandante de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF), Stanley McChrystal, que retrase su solicitud para que le sean enviados más soldados.

De acuerdo con las fuentes, el Gobierno de EEUU no quiere desplegar más efectivos hasta que sus mandos completen la revisión de su estrategia para acabar con los talibanes y los miembros de la organización terrorista Al-Qaeda que operan en Afganistán.

Un oficial del Pentágono declaró que "tenemos que asegurarnos de que contamos con la estrategia adecuada" porque "las cosas han cambiado sobre el terreno considerablemente".

De hecho, el propio presidente de EEUU, Barack Obama, indicó que su administración no autorizará nuevos envíos de tropas hasta no tener cerrada una nueva estrategia contra el terrorismo en Afganistán. "No vamos a tomar decisiones sobre más envíos de tropas hasta que sepamos exactamente cuál va a ser nuestra estrategia", dijo durante una entrevista en la televisión.

Obama enfatizó: "Lo que quiero hacer es asegurarme de que tenemos en cuenta todos los elementos, de que contamos con una estrategia coherente que vaya a funcionar".

Este lunes, McChrystal alertó de la necesidad de enviar más tropas a territorio afgano con carácter de urgencia, ya que de lo contrario la guerra, que ya se prolonga por ocho años, fracasará. "Nos exponemos a una derrota de la estrategia en los próximos doce meses si no somos capaces de derrotar la insurgencia", enfatizó el general en un dossier de 66 páginas enviado en agosto al secretario de Defensa, Robert Gates, quien a su vez lo remitió al presidente Obama.

Preguntado por el último informe de McChrystal, el portavoz del Departamento de Defensa, Geoff Morrell, mostró su confianza en este asunto quedará resuelto con la mayor brevedad posible y subrayó que el presidente de EEUU no adoptará ninguna decisión acerca de posibles nuevos recursos para Afganistán hasta no aclarar el contexto de forma general.