Como antesala a la Conferencia Internacional del Bangkok, ONUSIDA presentó la semana pasada su informe sobre la situación de la enfermedad en el mundo.

ÚLTIMO INFORME ONUSIDA
El número de personas infectadas por el virus sigue creciendo en todo el mundo. Según los datos facilitados por el Programa Conjunto de las Naciones Unidas contra el sida (ONUSIDA), de 35 millones de casos en 2001 pasamos a 37,8 en 2003.

En su informe anual, presentado la semana pasada, esta organización explicó que la mayor incidencia de la enfermedad se presenta en las mujeres embarazadas del África Subsahariana, y señaló que el otro gran foco de diseminación de la epidemia se localiza en Europa del Este y Asia Central, a causa del alto consumo de drogas inyectadas.

Según el estudio, el año pasado se registraron cinco millones de nuevos infectados, de los cuales el 25% se encuentra en Asia. Lo más grave de la epidemia, según Paul De Lay, director de ONUSIDA, es que sólo el 7% de los portadores del virus en los países pobres tiene acceso a los medicamentos antirretrovirales que se usan para su tratamiento.

Añadió que en 2005 harán falta 12.000 millones de dólares para poder dar una respuesta eficaz al avance de la enfermedad en los países en vías de desarrollo. Actualmente el gasto anual para detener el sida asciende a 5.000 millones de dólares.

Sin embargo, ONUSIDA sostiene que también hubo acontecimientos positivos en 2003, entre los que destacó el creciente interés y liderazgo de los actores políticos de todo el mundo en la batalla contra la enfermedad.