Ha adelantado su fecha de celebración y será el 23 de mayo. En principio, las posturas de Hollande y de Durao Barroso parecen chocar. Merkel se mantiene firme y se opone a reabrir el pacto.
UNIÓN EUROPEA
Varios van a ser los puntos de vista y las aspiraciones en esa Cumbre, el principal, el de Hollande que aspira a que al concepto de estabilidad se le pueda unir el de crecimiento, algo en lo que insiste uno de los políticos más cercanos al Presidente francés, como es Pierre Moscovici. Merkel, por su parte, reitera que no se pueden crear “espejismos de crecimiento” y Barroso apuesta por un lema que
El País define como diáfano: “acción para el empleo, acción para el crecimiento”.
Tampoco parece percibirse consenso entre Van Rompuy y Durao Barroso. El primero fue quien informó de la fecha de la Cumbre y el segundo dijo que no habrá “ocurrencias de última hora” (
La Razón).
Alemania espera que Hollande apueste por una línea continuista con respecto a Sarkozy, siendo la explicación al respecto de Merkel, la siguiente:
“el pacto no se puede reabrir, ha sido firmado por 25 países, ratificado por dos, Grecia y Portugal, en Irlanda va a haber referéndum el 31 de mayo. En Europa, por principio, no debemos regirnos porque unas elecciones, sea en países grandes o pequeños, nos hagan revisar los acuerdos” (
La Vanguardia).
En Reino Unido, David Cameron y su socio Nick Clegg, insisten en que seguirán tomando decisiones difíciles puesto que “son los pasos en la dirección adecuada”. Sin embargo, entre los conservadores no hay consenso al respecto, de tal manera que algunos de los diputados han proferido duras críticas hacia Cameron y Osborne a quienes consideran los grandes responsables del fracaso en las municipales de la pasada semana (
ABC).
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