Tras la presentación del informe de coyuntura, el FMI celebra una cumbre marcada por las buenas perspectivas económicas, aunque no faltan las incertidumbres.

ARRANCA LA CUMBRE DEL FMI Y DEL BANCO MUNDIAL
La recuperación económica, la incertidumbre sobre Iraq, la deuda de países pobres y la influencia de China en la escena mundial dominarán las reuniones del Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y el Grupo de los Siete (G7) que hoy arranca en Washington. Será el primer evento de estas características que se celebre con Rodrigo Rato como director gerente del FMI.

La salud de la economía mundial está mejorando desde la primavera según el FMI, cuyas previsiones de crecimiento para 2004 se mantienen prácticamente en los niveles calculados a principios de año, como indicó en el documento presentado el pasado miércoles, Panorama Económico Mundial, del que ya informó El Diario Exterior.

Sin embargo, las incertidumbres no dejan de estar presentes en el panorama económico mundial, entre otras cuestiones por el comportamiento que tenga el petróleo. Por eso el director gerente del FMI, Rodrigo Rato, recomendó ayer a Estados Unidos que reduzca su déficit presupuestario. En su opinión, los déficit récord (presupuestario y comercial) en Estados Unidos, implican un riesgo permanente para el sistema financiero mundial si los inversionistas extranjeros deciden no sostener a un país que vive por encima de sus posibilidades.

Por lo que se refiere a la Unión Europea y Japón, les recordó que tienen una responsabilidad “desde el punto de vista de la reducción de los desequilibrios, que constituyen una amenaza para la recuperación económica mundial”.

Otras recomendaciones

Respecto a América Latina, el responsable máximo del organismo internacional aseguró que muchos gobiernos de la región tienen que preocuparse más por “aumentar sus bases fiscales” como forma de reducir su vulnerabilidad. Destacó que algunos países de la región registran “crecimientos importantes”, entre los que citó a Brasil, Perú, Argentina y Chile, lo que hace que éste sea un momento óptimo para afrontar reformas.

Por lo que se refiere a la difícil situación argentina, Rato afirmó que, a pesar de apuntar su alto crecimiento, previsto en un 7% para este año, la reestructuración de la deuda en suspensión de pagos es “la única forma para que Argentina empiece a dar soluciones claras a los problemas sociales y económicos de los últimos años”.

Por otra parte, Rato dijo que el FMI vigilará la utilización de la asistencia de urgencia para Iraq aprobada el miércoles por los administradores en el marco de la ayuda a los países que salen de un conflicto. En concreto, afirmó que “vigilaremos la utilización de los recursos por el Gobierno iraquí”. Los administradores del FMI aprobaron un préstamo de 436 millones de dólares (350 millones de euros) a Iraq como asistencia de urgencia a un país que sale de un conflicto.

La situación española

Por lo que se refiere a España, el FMI ha rebajado la previsión de crecimiento hasta el 2,6%, una décima menos de lo estimado en abril, y por debajo del 2,8% que prevé el Gobierno. En 2005 calcula que la economía española crecerá un 2,9%, cuatro décimas menos que lo estimado anteriormente y muy próximo al 3% que recoge el cuadro macroeconómico de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Esta rebaja sobre las previsiones anteriores en se justifican, en parte, por el alza de los precios del petróleo. No obstante, el crecimiento de España se mantendrá este año y el próximo por encima del aumento previsto por el FMI para la zona euro, que sitúa el 2,2% en 2004 y 2005.

El informe del FMI es optimista respecto a la evolución de la inflación en España y calcula que el Índice de Precios de Consumo (IPC) cerrará este año en el 2,8%, frente al 3% del pasado ejercicio.

Sin embargo, el Fondo advierte sobre las incertidumbres que genera el mercado inmobiliario español y resalta las graves consecuencias que tendría en la actividad económica una brusca corrección de la vivienda.

Un intenso fin de semana

Las reuniones anuales del FMI incluyen dos días de sesiones plenarias, durante los cuales los Gobernadores abordan los temas de interés y se dirigen a los delegados reunidos para que éstos presenten las opiniones de sus países respecto de asuntos de la situación económica y financiera internacional. La Asamblea de otoño del FMI, a la que seguirá la reunión del G-7 el próximo sábado, estará marcada por dos circunstancias. Una, que es la primera que lidera Rodrigo Rato como director gerente del Fondo. Y dos, que tiene lugar en uno de los mejores momentos para la economía mundial de los últimos cinco años.

La Junta de Gobernadores del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Junta de Gobernadores del Banco Mundial se reúnen normalmente una vez al año para analizar el trabajo de sus respectivas instituciones. Las reuniones anuales, que por lo general se efectúan en septiembre u octubre, suelen celebrarse en Washington durante dos años consecutivos y en otro país miembro el tercer año.