El vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, se mostró optimista sobre la situación de la economía española, que calificó de “magnífica”, aunque reconoció que existen riesgos para el futuro derivados, principalmente, del precio del petróleo y de la menor actividad en Europa.

Restó importancia al elevado déficit comercial de España
“Soy muy optimista a corto plazo, pero debemos utilizarlo para ir corrigiendo los problemas que el país tiene, que son muchos, si queremos que a largo plazo tengamos también altos niveles de crecimiento”, indicó Solbes en declaraciones a Radio Nacional de España.

El vicepresidente segundo destacó que desde que el PSOE entró en el Gobierno ha aumentado “de forma muy sustancial” el diferencial de crecimiento respecto a la economía europea. No obstante reconoció que una parte de este incremento del diferencial es consecuencia de que la economía española crece a un ritmo más alto y otra parte se debe a la ralentización de la economía europea, “y eso no me gusta, me gustaría que ellos crecieran más porque eso sería bueno para todos”, subrayó.

En cualquier caso indicó que la situación de la economía española es “magnífica” comparada con un entorno de menor crecimiento de la economía europea. “Baste con analizar la evolución del mercado de valores, los beneficios de las empresas, la evolución del empleo, del gasto y de la inversión en bienes de equipo para llegar a la conclusión de que estamos en un momento dulce”, manifestó.

El vicepresidente económico restó importancia al elevado déficit comercial, y explicó que el aumento de las importaciones españolas se debe a que la economía está creciendo más, a que el consumo privado está relativamente alto y a que se importan sobre todo productos intermedios y también bienes de equipo.

Además, resaltó que el problema de las menores exportaciones se debe a las dificultades por las que atraviesa Europa, zona que constituye el 70% de las ventas españolas al exterior, mientras que fuera de Europa el ritmo de crecimiento de las exportaciones está “próximo a los dos dígitos”. “Por eso es tan bueno que la situación vaya muy bien en Europa y que el diferencial de crecimiento se reduzca, no porque nosotros crezcamos menos sino porque los europeos crezcan más”, aseveró.

Sobre el futuro de las pensiones, Solbes dijo sentirse ahora “mucho más tranquilo” que en su anterior etapa como ministro de Economía a principios de los años 90, y señaló que el cambio demográfico generado por la inmigración y el aumento de la natalidad junto con algunos “retoques” al sistema deberían ser suficientes para garantizar su viabilidad.