El presidente de EEUU, George W. Bush, indicó ayer que “debemos prepararnos para lo peor” mientras el huracán Rita alcanzaba la categoría de 4 y disparaba la alerta máxima en la zona de Texas y Nueva Orleans.

En una intervención ante la Coalición Judía Republicana, Bush indicó que “rezamos para que no se trate de otra tormenta devastadora” como Katrina, e instó a los ciudadanos a “escuchar muy atentamente las advertencias” de las autoridades sobre evacuaciones y otras medidas de precaución.

Ya se están efectuando “evacuaciones obligatorias” en Nueva Orleans, así como en Galveston y en partes de Houston, en la costa del estado de Texas, así como otras voluntarias en las zonas que se prevé que pueden ser objetivo del nuevo ciclón.

El presidente reiteró que el Gobierno va a ayudar hasta el final a las víctimas del desastre causado por Katrina, que el 29 de agosto devastó las costas de Luisiana, Misisipi y Alabama, y anunció una serie de incentivos para favorecer la recuperación de la zona.

Según Bush, habrá beneficios fiscales para las empresas que se instalen en la región porque “queremos que la gente vuelva allí” y también se proporcionará terreno a los supervivientes para que puedan construir nuevos hogares.

“Va a haber un ´boom´ de la construcción” en el golfo de México, dijo Bush, antes de subrayar que el sector privado “tiene que ser el motor” de la recuperación y aportar su grano de arena para la normalización de las vidas de los afectados y de la creación de los empleos perdidos en la zona devastada.

En tono contundente, Bush hizo hincapié en que “tenemos la obligación de ayudar” y aseguró que EEUU responderá a esta crisis con todos los medios a su alcance.

El presidente de EEUU ya ha emitido declaraciones de zonas de desastre en los lugares donde se prevé que pueda tocar tierra Rita, previsiblemente el viernes o sábado próximo, para facilitar el envío de fondos federales en concepto de ayuda de emergencia.

El alcalde de Houston (Texas), Bill White, hizo ayer un llamamiento a todos los ciudadanos para que comiencen a prepararse para una evacuación ante el avance hacia la zona del peligroso huracán Rita, de categoría cuatro.

“Pedimos a todos los residentes del área de Houston que empiecen a hacer planes de evacuación”, dijo el alcalde en rueda de prensa en la que ya solicitó la salida voluntaria de la población de las zonas más bajas y más propensas a las inundaciones.

Según White, que insistió en que el ciclón Rita plantea un serio riesgo para la región, quienes vivan en casas prefabricadas deben abandonarlas cuanto antes.

El alcalde de Houston, en cuya área metropolitana residen cerca de 4 millones de personas, se dirigió también a las personas que puedan necesitar ayuda para pedirles que se trasladen ya a casas de familiares o de amigos que puedan echarles una mano a la hora de la evacuación.

Los colegios, añadió, deben cerrar hoy, jueves, y también el viernes, mientras que las empresas deberían prescindir esos dos días del personal que no sea estrictamente necesario.

Además de Houston, la previsible trayectoria de Rita, que hoy ha alcanzado la categoría 4 (de un máximo de 5) ha obligado ya a las autoridades de la ciudad de Galveston, también en Texas, a iniciar la evacuación de los lugares más vulnerables, como los hospitales o las residencias de ancianos.