Hace más de 60 años que se demostró que el salario mínimo genera más desempleo pero los políticos le rinden culto, sin importarles sus desvastadores efectos a largo plazo.
// OTROS TEMAS QUE TE PUEDEN INTERESAR
Sábado, 14 de diciembre 2024
Hace más de 60 años que se demostró que el salario mínimo genera más desempleo pero los políticos le rinden culto, sin importarles sus desvastadores efectos a largo plazo.
El ministro español de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, anunció que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) subirá el próximo 1 de julio un 6,6%, hasta 490 euros al mes -actualmente es de 460 euros-, lo que permitirá a sus perceptores recuperar todo el poder adquisitivo perdido desde 1997.
En su primera comparecencia ante la comisión de Trabajo y Asuntos Sociales del Congreso, Caldera afirmó que este incremento permitirá que de forma escalonada el SMI alcance al final de la legislatura 600 euros, tal y como establecía el programa electoral del PSOE.
El acuerdo incluye también que si la inflación interanual sube por encima de este 4,5, se aplicará una cláusula de garantía salarial, para que los trabajadores que perciben este salario mínimo no pierdan poder adquisitivo.
Por lo menos esto es lo que creen los políticos porque la economía dice lo contrario. Si los salarios se pudiesen acordar por decreto, los precios de mercado estarían de más. Pero el punto es otro: es generar la idea de que el gobierno es una agencia de compasión que se preocupa por los más necesitados. Unirse contra la "patronal" y emprender una quijotesca batalla contra la "opresión del capital" es para un político darse un baño de masas.
La medida, lejos de beneficiar a los oprimidos, los condena al desempleo, ya que deberán encontrar un empresario que les pague lo que dice el gobierno y no lo que dicten las leyes del mercado. El resultado es el opuesto que se quería alcanzar: más desempleo, más pobres y menos empresas, ya que hoy nadie se lo piensa dos veces a la hora de huir del caciquismo político.
También Caldera se equivoca respecto a sus temores inflacionarios. La inflación es el resultado de la expansión monetaria inducida por el gobierno para solventar su exceso de gasto. Es una práctica muy frecuente que el gobierno emita dinero inyectando reservas al sistema bancario. Con esta inyección de reservas se puede comprar más y eso genera una corta bonanza que ocasionará un aumento de precios y una depreciación de la moneda. Esa es la causa de la inflación y no el esoterismo financiero del cual hace gala el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales.
// OTROS TEMAS QUE TE PUEDEN INTERESAR
// EN PORTADA
// LO MÁS LEÍDO
// MÁS DEL AUTOR/A