Un histórico discurso
El 3 de octubre de 2017 el Rey pronunció un inolvidable discurso a la nación a raíz del desafío independentista en Cataluña, que llegó incluso a la proclamación momentánea y surrealista de la independencia por parte de las autoridades autonómicas en el Parlamento. A los cinco años de aquel discurso, recordamos que el Rey catalizó la respuesta del Estado de Derecho a uno de los ataques más graves que ha padecido. Hoy podemos ver con claridad que aquel golpe fallido no fue flor de un día y que el hecho de que las autoridades se sitúen reiterada y deliberadamente al margen de las leyes conduce al desastre. Como subrayó entonces el Rey, aquellas actitudes menospreciaron los afectos y los sentimientos de solidaridad que han unido y unirán a los españoles, e incluso pusieron en riesgo la estabilidad económica y social de todo el país. Utilizar a aquellos que pretendieron quebrar la unidad de España y la soberanía nacional como compañeros de viaje de Gobierno, como ha hecho el Ejecutivo de Pedro Sánchez, es una enorme irresponsabilidad. En esas estamos y ahí seguimos, como muestra la polémica con las negociaciones sobre el Poder Judicial.