Francia instó a Argentina a “respetar los intereses” del grupo francés de servicios a las colectividades Suez, que ha anunciado que se retirará del mercado de distribución de agua en ese país debido a un conflicto sobre tarifas.

La política populista de Kirchner pone en peligro las inversiones extranjeras
Un portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores advirtió además a Buenos Aires de que la falta de acuerdo puede “desanimar las inversiones extranjeras” en el país latinoamericano.

El Ministerio de Asuntos Exteriores galo se limitó a decir que Francia “lamenta” la falta de acuerdo entre las autoridades argentinas y el grupo francés, pero puntualizó que correspondía a Suez “apreciar la situación”.

El Gobierno argentino aseguró ayer a los medios de prensa,  que estaba dispuesto a reanudar las negociaciones con Suez para que no se retire del mercado local de distribución de agua si “decide negociar en los términos” propuestos por Buenos Aires.

Suez anunció el pasado viernes en un comunicado su decisión de retirarse de su filial Aguas Argentinas debido al conflicto que mantiene con las autoridades locales sobre las tarifas, que permanecen congeladas desde comienzos de 2002.

La compañía, en la que Suez tiene el 39,93% y comparte su control con la española Aguas de Barcelona (25,01%), presta servicios de agua potable y cloacas a millones de clientes de la capital argentina y su populoso cordón urbano. El grupo francés expondrá su decisión de retirarse en el próximo consejo de administración de Aguas Argentinas, previsto el próximo día 19, y la someterá tres días más tarde a los accionistas en una asamblea extraordinar