Política

El entusiasmo de las instituciones contrasta con el escepticismo de la población en Chipre y en Turquía

El acuerdo alcanzado entre la UE y Turquía para negociar su adhesión provocó el entusiasmo en las instituciones políticas y económicas, así como en los medios de comunicación. Optimismo que contrasta con el escepticismo reinante entre la población turca y chipriota.

DELICADO CAMINO HACIA LA ADHESIÓN TURCA A LA UNIÓN EUROPEA
La adhesión de Turquía a la Unión Europea no será fácil, todavía son muchos los
obstáculos que han de salvarse y muy diferentes las sensibilidades dentro de
cada Estado. En Chipre, por ejemplo, las reacciones han sido diversas después de
que la UE llegará por fin a un acuerdo para iniar las negociaciones de adhesión
con Turquía.

Después de que la oposición chipriota criticase la falta de
firmeza del Gobierno ante Turquía, su presidente, Tasos Papadopoulos salió a la
palestra para explicar su decisión. Según Papadopoulos su gobierno no vetó el
acuerdo de adhesión porque habría sido contraproducente para los intereses de
Chipre y habría consolidado la invasión de la isla. El presidente chipriota
explicó que el veto no habría ayudado al objetivo principal del país, que pasa
por lograr una solución viable y justa al problema de la división de la isla.


Parece ser que el escepticismo es el sentimiento reinante tanto entre
chipriotas como entre turcos, aunque también se percibe una nota de esperanza
para lograr, por fin, la reunificación de la isla a raíz del acuerdo alcanzado
con la Unión Europea. De momento, reina la cautela entre los turcos y los
griegos chipriotas.

Los greco-chipriotas aún se muestran un poco
decepcionados, ya que durante semanas defendieron el reconocimiento pleno de la
República de Chipre a cambio de evitar el veto ante la apertura de negociaciones
entre Turquía y la Unión. Se oyen voces que hablan de “derrota” del Gobierno de
Tassos Papadopoulos, que se muestra prudente y cauto. Papadopoulos insiste en
que “siempre hemos apoyado la vía europea para Turquía”, pero asegura que al
mismo tiempo “hemos considerado sus obligaciones hacia la UE y en consecuencia
hacia Chipre”. No obstante, se muestra optimista de cara al futuro. Para el
presidente chipriota el 17 de diciembre no fue el final del camino, sino el
principio, y subrayó que Chipre sigue manteniendo el derecho de veto en caso que
Turquía no cumpla sus deberes hacia la isla mediterránea.

Erdogan también recibe críticas

Por su parte,
el primer ministro turco, Recep Tayyib Erdogan, instó a sus compatriotas a
celebrar el acuerdo alcanzado con la UE como si fuera “una gran fiesta”. A pesar
de que miles de personas le recibieron en el centro de Ankara con banderas de
Turquía y de la UE, nada más aterrizar tuvo que enfrentarse a las críticas por
haber cedido en la cuestión de Chipre.

A pesar de la fiesta inicial, los
turcos despertaron ayer con más frialdad que entusiasmo, calibrando las
consecuencias de haber aceptado el acuerdo con la UE. Sin embargo, las portadas
de los diarios coincidían en el espíritu esperanzador que mostró Erdogan a su
llegada. Según los diarios turcos el 17 de diciembre ha abierto una de las
páginas más importantes en los últimos cinco siglos de historia mundial, dando
inicio no sólo a una revolución para Turquía, sino para toda Europa.

En
líneas generales, parece que contrasta el entusiasmo de las instituciones
políticas y económicas y los medios de comunicación con la apatía e incredulidad
de la población.

// OTROS TEMAS QUE TE PUEDEN INTERESAR

// EN PORTADA

// LO MÁS LEÍDO

// MÁS DEL AUTOR/A

Menú