La vertiente económica de la cumbre será uno de los factores para determinar su éxito o su fracaso. Hay posibilidad de acuerdo, pero las dificultades son muchas.

CUMBRE UE-AMÉRICA LATINA
Mientras el ambicioso proyecto de EEUU de crear un Área de Libre Comercio de las
Américas (ALCA) permanece estancado, la UE avanza en acuerdos de concertación
política, económica y de cooperación con la región latinoamericana. Hasta hace
poco EEUU llevaba la delantera, con cumbres periódicas con los jefes de Estado
de toda la región desde 1994 y la intención de crear una de las zonas de libre
comercio más grande del globo, pero la Unión Europea ha ido recuperando terreno
y hoy parece que su posición como socio comercial es más relevante.

De
hecho, ya tiene dos socios: México y Chile, mientras acerca posiciones para
iniciar negociaciones con Centroamérica y la Comunidad Andina de Naciones (con
120 millones de habitantes), que agrupa a Colombia, Ecuador, Venezuela, Bolivia
y Perú.

Además, los objetivos incluyen también poner en práctica
convenios sectoriales específicos y concretar el Acuerdo de Asociación Económica
entre Mercosur y la Unión Europea. También se pretende alcanzar avances
sustantivos en las negociaciones con los países del Caribe en el marco del
Acuerdo de Cotonú. El objetivo a largo plazo sería la concreción de un Acuerdo
de Asociación Birregional hacia el año 2010.

La
difícil negociación con Mercosur

Uno de los mayores escollos en
el desarrollo de la estrategia económica conjunta entre ambas regiones es el
acuerdo con Mercosur (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay). Esta misma semana
la Comisión Europea aseguró que la oferta planteada por estos países no está a
la altura de la europea y dio a entender que si no hay mejoras no se podrá
concretar un acuerdo el próximo octubre, como pretenden ambas partes. No
obstante, de Guadalajara podría salir un calendario de negociaciones aceleradas
para conseguir este objetivo, con próximas rondas en Buenos Aires (junio) y
Bruselas (julio).

La asociación UE-Mercosur empezó a negociarse en 1999
e incluirá la creación de un área de libre comercio, junto a acuerdos de
cooperación y diálogo político. Este proceso, junto a las asociaciones del mismo
tipo ya establecidas con México y Chile, constituyen los hitos más importantes
de la relación entre la UE y América Latina. La Unión ofrece además preferencias
comerciales de menor orden a las regiones andina y centroamericana.