Pensamiento y Cultura

La realidad siempre supera a la ficción

El comentario
Lo dice un refrán español y es verdad. Por mucha imaginación que le pongan los escritores a sus historias, la realidad, lo del día a día, la vida cotidiana, saca lo mejor de si misma y, en un momento u otro, termina demostrándolo.
Hoy merecía la pena traer a este espacio del comentario dos historias de animales, que siempre son el contraste con los comportamientos humanos. Dos historias con color distinto, pero dignas de ocupar un espacio propio.
La primera es la noticia de que un hombre a mordido a una pitón. Nunca un periodista puede pasar por alto un caso como este. La primea enseñanza que nos dan a todos, nuestros maestros en el arte de contar lo que ocurre, en ese delicado aprendizaje de seleccionar lo que es y lo que no es noticia, hay un ejemplo utilizado y extendido: Noticia es que un niño muerda a un perro. No que el perro muerda al niño. Pues hoy nos encontramos con ese caso. Un hombre ha mordido, nada más y nada menos, que a una pitón. La serpiente le rodeo con su cuerpo y se lo llevó a un árbol cercano, se supone, que para comérselo. Pero le salió mal. El hombre en cuestión se lió a mordiscos hasta que el animal, dolorido por las dentelladas, aflojó y le permitió llamar por teléfono a las autoridades, que le ayudaron. Todo salió bien.
La segunda historia no es tan original. Los protagonistas son los delfines que, con frecuencia, se ganan el aprecio de los seres humanos. Hay muchos ejemplos, que se cuentan en las tertulias de los cafés, de delfines que han participado de una u otra forma en la salvación de seres humanos. Pues de esto les quiero hablar. Un grupo numeroso, cercano o superior a los mil delfines, juntos, han evitado que piratas somalíes pudieran secuestrar a barcos chinos. Los delfines rodearon a sus protectores para evitar que las lanchas de los piratas pudieran acercarse a los mercantes y conseguir su objetivo malvado y dañino.
Lo delfines ya han demostrado en más ocasiones su solidaridad con los humanos. Es como si quisieran comunicarse con nosotros pero seamos nosotros, los racionales, los que no lo entendemos. Que se sepa, hay pocos humanos que hayan defendido a delfines, pero al revés lo hemos visto repetido.
No estaría mal investigar mínimamente en esa línea de comunicación entre los hombre y los delfines. Quizá pudiéramos hablar con ellos.

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