La ráfaga de críticas por el desborde de la situación migratoria en el sur de España abarca desde opositores y funcionarios hasta la propia Asociación Unificada de la Guardia Civil, que reprochó al gobierno la falta de medidas contundentes. El líder de la oposición, Mariano Rajoy, calificó de “irresponsable” la actitud del gobierno y pidió la comparecencia del presidente en el Congreso

Mariano Rajoy: Zapatero actuó con irresponsabilidad y absoluta dejadez
El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, acusó al Gobierno de haber actuado con “irresponsabilidad” y “con absoluta dejadez” ante las advertencias de su partido sobre el “efecto llamada” de la última regularización de inmigrantes, y, sobre todo, ante los asentamientos y traslados a la frontera permitidos y efectuados por el propio reino marroquí.

El líder de la oposición cargó contra el accionar del gobierno al que catalogó como tardío y responsable de “dejar a sus suerte a las comunidades autónomas”. El dirigente pidió la comparecencia urgente del jefe de gobierno en el congreso.

La ley de extranjería

Por su parte, los presidentes de las comunidades de Melilla y Ceuta, Juan José Imbroda y Juan Jesús Vivas, expresaron su preocupación por el desborde de la situación y responsabilizaron a Zapatero por no intervenir antes. Según pudo averiguar Diario Exterior, ambos presidentes cuestionan la actual ley de extranjería que –aseguran- debería permitir la expulsión de los inmigrantes indocumentados.

La falta de colaboración de Marruecos Imbroda y Vivas también cargaron contra la falta de decisión del gobierno de Marruecos, resaltando “la dejadez en su tarea de control fronterizo”. Según Imbroda, “la colaboración de Marruecos [en el asunto de los asaltos a la valla] ha sido muy deficiente, ha brillado por su ausencia; si hubiese colaborado bien con sus leyes y hubieran actuado de otra forma, esto se podía haber evitado”.

En cuanto a las causas que han podido llevar al país vecino a no colaborar en este problema, asegura que puede ser “una manera que tienen de presionar al Gobierno español para sacar otra serie de contrapartidas en algún momento”, en alusión a la cumbre hispano marroquí que se está desarrollando en Sevilla.

El error de la política migratoria

Del mismo tono fue la crítica expresada por el secretario del Partido Popular, Angel Acebes, al señalar que las avalanchas de inmigrantes han provocado que ambas ciudades se encuentren en una situación “prácticamente insostenible”, mientras las autoridades marroquíes podrían hacer “muchísimo más” y el Gobierno ha demostrado su debilidad al no denunciar lo ocurrido “con firmeza y claridad”.

Acebes fustigó el accionar del gobierno señalando que “el Ejecutivo ha cometido dos importantes errores en política de inmigración. Por un lado, con el último proceso de regularización extraordinaria ha trasmitido a los inmigrantes el mensaje de que pueden entrar al país “por las buenas o por las malas” y que finalmente podrán establecerse legalmente. El segundo error, en su opinión, es la actitud española en las relaciones bilaterales con Marruecos, al no transmitir al Reino alaui “ninguna exigencia” ni ningún “gesto de firmeza” tras los últimos incidentes en las ciudades autónomas.

La respuesta oficial

Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, informó ayer que serán 480 los efectivos militares que reforzarán la vigilancia en las vallas de Ceuta y Melilla y anunció que el Consejo de ministros aprobará hoy un plan especial de seguridad para ambas ciudades.

De la Vega explicó que ayer mismo la Guardia Civil recibió el apoyo del Ejército y que hoy el Gobierno dará luz verde a medidas específicas de incremento de la seguridad, abordando el problema de los centros de internamiento de inmigrantes y recogiendo alguna otra iniciativa de tipo social.