Tras decidir no presentarse a las elección dejando “ese lugar” a Vladimir Putin, Medvedev lo ha explicado, aunque no ha convencido, en especial a la opinión pública mundial, pues sostienen que se trata de un político sin personalidad controlado en todo momento por su mentor. Habló de que Putin es el político con más autoridad de Rusia y que goza de elevados índices de apoyo, “incluso superiores a los míos”.

No percibe su modo de actuar como una anomalía democrática, sino que al contrario, cree que Obama y Hillary Clinton hicieron algo similar en Estados Unidos. Para él, como pudimos ver en La Voz de Rusia, lo más importante es el país y no las aspiraciones individuales, añadiendo que “la elección corresponde al pueblo. No son palabras vacías. Cualquier personaje político puede fracasar en las elecciones, al igual que su fuerza política. Es algo que ocurrió más de una vez en la historia de nuestro país y también de otros países. Nadie está asegurado contra nada. ¿Qué predeterminación? La gente decidirá por quién votar, por quien tenga más prestigio. Son nuestros ciudadanos los únicos que son capaces de poner los acentos definitivos, al votar por una u otra persona, por una u otra fuerza política”. 

Sin embargo, la mayor parte de sus compatriotas creen que los resultados de las elecciones manipularán. Sobre el resultado de los comicios, Medvedev se muestra cauto y no cree que “estén ganadas de antemano” y por el contrario afirmó que lo mejor es que el pueblo se exprese en una u otra dirección (El Nacional)