China, por su parte, tiene ya 18 submarinos nucleares, 14 de los cuales estarían ya operativos.

Las crecientes ambiciones hegemónicas de China se toparon, el año pasado con un obstáculo no inesperado: la intimidad entre tres países cercanos, de habla inglesa: los EEUU, Gran Bretaña y el Reino Unido. Como consecuencia de ello Australia podrá, en más, construir y desplegar submarinos atómicos y equiparlos con misiles “Tomahawk”.

De esta manera, los EEUU refuerzan su presencia en el Pacífico occidental. Lo que han completado con un acuerdo con Francia para construir buques de guerra y patrullaje.

Es obvio que el expansionismo militar chino es la razón esencial de lo señalado. Lo que incluye, específicamente, renovadas amenazas e intimidaciones contra Taiwán, cuya reunificación con el resto del territorio de China persigue insistentemente Beijing, de modo cada vez más asertivo.

China, por su parte, tiene ya 18 submarinos nucleares, 14 de los cuales estarían ya operativos. Esto –entre otras razones- ha impulsado obviamente el antes mencionado pacto militar trilateral.

(*) Ex Embajador de la República Argentina ante las Naciones Unidas.