Repartiendo dulces, la red propalestina Samidoun había festejado en Berlín los ataques terroristas de Hamás en Israel, en los que murieron cientos de civiles.
Según el servicio de inteligencia alemán, unas 450 personas trabajan para Hamás. Muchos son ciudadanos alemanes. Aunque oficialmente no existe una rama del grupo extremista en Alemania, el servicio de inteligencia alemán estima que la asociación Samidoun pertenece a la organización palestina radical Frente Popular para la Liberación de Palestina, que también propaga la lucha armada contra Israel, pero no tiene un sello religioso. Ya en 2020, Berlín prohibió la Hizbulá libanesa, que apoya a Hamás a nivel internacional.
Además, desde hace años, el servicio de inteligencia germano tiene bajo observación al Centro Islamista de Hamburgo, que sería controlado por el régimen iraní que felicitó a Hamás tras los atentados terroristas del pasado siete de octubre. Asimismo, la Asociación de la Comunidad Palestina en Alemania formaría parte de la red de apoyo de sectores radicales.
De acuerdo con un informe del servicio de inteligencia alemán de 2022, “Estados occidentales como Alemania son usados como territorios de refugio para Hamás, en donde la organización se concentra en recolectar donaciones, reclutar nuevos miembros y difundir su propaganda”.
El canciller Scholz anunció que se prohibirán las actividades de Hamás en Alemania, así como la organización Samidoun. “No aceptamos que en nuestras calles se celebren los repugnantes ataques contra Israel”, dijo el canciller alemán, Olaf Scholz. La ministra del Interior, Nancy Faeser, también busca proceder contra otras personas que apoyen a Hamás o simpaticen con la organización, por ejemplo, recaudando donaciones. Incluso estudia la posibilidad de expulsar del país a miembros de la escena islamista que cometan delitos y que no posean un pasaporte alemán.