Este proceso de mayor demanda está provocando cambios en el modo de concebir el periodismo y abre un panorama de signo positivo para las empresas informativas, según una encuesta realizada por Pew Research Center’s Project for Excellence in Journalism, cuya síntesis se recoge bajo el título The state of the news media 2012.La creciente adición a la actualidad, como se desprende de la investigación, no es la simple consecuencia del mejor acceso. Los expertos digitales consumen información de manera compulsiva a través de varias plataformas simultáneamente y exigen formatos nuevos, con mayor interacción. Según la encuesta Mobile devices and news consumption, casi una cuarta parte de los adultos norteamericanos utilizan para informarse combinaciones de varios aparatos: ordenador y teléfono móvil, ordenador y tableta o incluso los tres tipos de soporte a la vez.
Varios tipos de aparatos
Entre los encuestados por el Pew Research Center, el 70% de los que poseen un ordenador de mesa o portátil afirma acceder a la información de actualidad desde él; en el caso de los móviles, el 51% de sus propietarios conoce por ellos las noticias, mientras que un porcentaje algo superior de los que tienen tabletas –el 56%– las usa para estar informados. Poseer varios aparatos abre por tanto posibilidades simultáneas de consumo de actualidad, si bien es cierto que uno de los soportes, normalmente el ordenador, ocupa un lugar prioritario. En conjunto, se trata de un proceso progresivo: la adquisición de un teléfono tipo smartphone o una tableta hace que la fuente primaria de informaciones se vaya desplazando paulatinamente, pero sin abandonar, en cada paso, los aparatos anteriores.
A la facilidad de acceso también se une la evolución de los hábitos de los usuarios en su acercamiento a los contenidos. Hasta la explosión de los denominados teléfonos inteligentes, lo habitual ha sido proveerse de información a través de buscadores desde un ordenador personal. Agregadores como Google se han beneficiado de este comportamiento, aunque no siempre se buscara un tema o suceso concreto sino más bien la página principal de periódicos y otros medios de información en Internet. Esta vía –el site de un medio de comunicación o la aplicación que lleva a su contenido informativo– sigue siendo la más generalizada entre los consumidores de noticias digitales, ya sea desde ordenadores portátiles o de mesa, como desde las tabletas, cuyos usuarios son precisamente los más fieles en acudir a las cabeceras tradicionales como fuente de noticias.
Desde las redes sociales
Pese a lo que al principio pudo creerse, en el acceso a la información, el peso de las redes sociales no supera el tirón que siguen teniendo en internet las fuentes de actualidad consolidadas, como las empresas informativas. La encuesta de Pew Research señala que solo el 9% de los consumidores de noticias sigue “muy a menudo” las recomendaciones de Facebook o Twitter. Entre ambas, Facebook atrae el doble de seguidores de noticias que Twitter. No obstante, es verdad que el porcentaje de tráfico que llega desde las redes sociales a las páginas de información en internet ha crecido un 57% desde 2009, y entre los propietarios de teléfonos y tabletas el papel de las redes en el acceso a la actualidad es muy popular.
Otras investigaciones simultáneas valoradas por la encuesta, como la realizada por Localytics, también coinciden en afirmar que los usuarios de nuevas tecnologías móviles tienden a dedicar más tiempo a las noticias que el que consumían desde los ordenadores, gracias al recurso a las aplicaciones propias de los smartphones y tabletas. En informes anteriores de Pew Research ya se observaba una tendencia que se mantiene: el comportamiento de los dueños de tabletas es –frente al de otros soportes– el más ligado a la información de actualidad, pues sus usuarios acceden a través esas plataformas a artículos largos y exploran constantemente nuevas fuentes de contenidos.
Ante este panorama de consumo desenfrenado de noticias, las recomendaciones de la encuesta para las empresas informativas son tajantes y también optimistas. Por un lado, plantea una rápida adaptación tecnológica a la conducta de las audiencias, caracterizada por intereses globales frente al localismo de otras épocas. Por otro, la institución americana sugiere el paso a modelos de negocio coherentes con un tipo de lectores muy motivados por la comodidad de los terminales –se pueden contrastar las noticias desde un sillón o en situaciones hasta ahora despreciadas por el marketing empresarial– y atraídos por la posibilidad de experimentar aplicaciones sorprendentes.
Visualizar todo
Las recomendaciones de Pew Research van en la línea de lo que cabeceras de larga tradición, como Le Monde, ha impulsado ya. Este mismo mes el diario francés ha remodelado su página web con el objetivo de adaptar sus contenidos y facilitar un mejor acceso desde las redes sociales, canales de vídeo, etc. La edición digital del periódico es ahora interactiva, con informaciones en directo y una oferta constante de diálogo desde la redacción hacia los lectores. “Es lo más parecido a chatear con un amigo”, indica la presentación difundida, que aspira a continuar esa relación cercana con los lectores que llegan desde los teléfonos móviles.
Otras características de la página actualizada de Le Monde son el enfoque visual de cada noticia, con infografías animadas, documentales y vídeos, y la facilidad de conexión con las redes sociales. En opinión de los promotores de la remodelación, aunque “la página de internet es el principal espacio de difusión de contenidos, los lectores también los esperan en las plataformas complementarias, como el móvil y las tabletas, y en las redes sociales”.
Menos accesos gratuitos
Una vía diferente, más mercantilista y agresiva, es la que han tomado los propietarios de The New York Times para adaptarse a la demanda de actualidad. Un día después de conocerse las conclusiones del Pew Research, este diario americano anunciaba más limitaciones al acceso gratuito de su página web. Desde abril los internautas pagarán si consultan más de diez artículos por mes, cuando antes solo pagaban a partir de veinte. La tarifa fijada oscila entre 15 y 35 dólares mensuales, según se pretenda acceder al contenido desde el ordenador, el teléfono móvil o la tableta.
Hace ya un año que The New York Times en internet comenzó a cobrar por sus contenidos digitales –algo que desde siempre ha exigido The Wall Street Journal– y la experiencia ha resultado positiva, ya que en estos momentos reúne cerca de medio millón de suscriptores al servicio.