Veinte países firmaron el pasado fin de semana en la cumbre climática COP28 de Dubai el compromiso de triplicar su capacidad de energía nuclear de aquí a 2050.
La decisión, tomada en su mayoría por países europeos y norteamericanos, significa que la energía nuclear podría pasar de cubrir el 10% de las necesidades actuales de electricidad del mundo a cubrir casi un tercio en 25 años.
Las naciones firmantes manifestaron que creen que el mundo no alcanzará el objetivo de cero emisiones netas sin construir más centrales nucleares. El organismo industrial World Nuclear Association saludó la medida como “muy significativa”.
Decenas de nuevas centrales
En virtud del compromiso, los países adoptarán varias medidas, entre ellas, prolongar la vida de los reactores nucleares existentes hasta 80 años. Además, construirán nuevos reactores a gran escala y pequeños reactores modulares avanzados (SMR), como pregonan TerraPower -la empresa nuclear respaldada por el fundador de Microsoft, Bill Gates- y la firma británica de motores a reacción Rolls Royce.
Pero triplicar la capacidad nuclear no es tarea fácil. Requerirá que los gobiernos aceleren la aprobación de nuevas centrales nucleares, así como de enormes compromisos financieros. Muchos analistas especializados en energía nuclear se muestran escépticos sobre la viabilidad del plan.
La energía nuclear respalda a la eólica y la solar
Los partidarios de la energía nuclear afirman que desempeña un papel vital como respaldo de energías renovables como la eólica y la solar cuando estas no estén disponibles.
Los ecologistas, por su parte, suelen afirmar que la energía eólica y solar son mucho más baratas que la nuclear, algo que Jim Smith, catedrático de Ciencias Medioambientales de la Universidad británica de Portsmouth, califica de “falso”, Según el experto, ese argumento no tiene en cuenta el papel vital de reserva que desempeña la energía nuclear.
“Cuanto mayor es la proporción de renovables intermitentes en la red eléctrica, más caras resultan, porque se necesita más respaldo, ya sea en forma de baterías o de bombas de almacenamiento”, dijo Smith, citando un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
El hecho de que la Unión Europea calificara el año pasado la energía nuclear de ecológica y limpia supuso un gran impulso para la renovación del sector, a pesar de la falta de un lugar permanente para el almacenamiento seguro de residuos radiactivos. De hecho, los países europeos son 13 de los 20 signatarios del compromiso nuclear de la COP28, entre ellos Francia, Gran Bretaña, Bulgaria, Ucrania, Polonia, Hungría y Suecia.
El año pasado, Francia declaró que tenía previsto construir seis nuevos reactores nucleares y está estudiando la posibilidad de construir otros ocho.
Avances en la gestión de residuos radiactivos
Nuclear for Climate, una iniciativa popular de más de 150 asociaciones creada para impulsar la participación de la energía nuclear en la transición ecológica, considera que la nuclear es una de las fuentes de energía más seguras, y cada vez lo es más.
“La gestión de los residuos radiactivos también ha experimentado mejoras e innovaciones espectaculares en los últimos años”, declaró a DW Mattia Baldoni, portavoz de Nuclear for Climate. “El volumen de residuos es muy limitado. Y el primer depósito geológico profundo del mundo, que estará operativo en los próximos años, confirma que todos los residuos radiactivos pueden gestionarse y almacenarse de forma segura.”