América, Política

El Informe Pastrana sobre República Dominicana

Como candidato en cinco elecciones consecutivas, debo decir que lo plasmado en el Informe Pastrana, lo que hace es mayormente recopilar las preocupaciones de la ciudadanía dominicana sobre nuestro sistema.


La Organización de Estados Americanos (OEA) tiene un largo historial de Misiones de Observación Electoral (MOE) en la región. Una historia que de hecho inicia con mi país, República Dominicana que fue, junto con Costa Rica, receptor de las primeras dos misiones despachadas en 1962 por parte del organismo. De ahí en adelante, los hemos tenido como acompañantes en nuestros 15 procesos electorales posteriores a la prolongada dictadura de Trujillo.

Los recientes comicios celebrados el 15 de Mayo del presente año le dieron continuidad a esta relación y nuevamente recibimos una MOE, encabezada por el ex Presidente Andrés Pastrana de Colombia. Estadista que también ha mantenido una relación cercana con los procesos electorales dominicanos, habiendo observado anteriormente la elección presidencial del 1996 y la del 2004, esta última igualmente como jefe de misión de la OEA. Coincidencia histórica, su padre, Misael Pastrana, también había encabezado la MOE para el proceso electoral dominicano de 1978. 

Este proceso sin embargo, como bien resaltó el Presidente Pastrana al presentar su informe verbal ante el Consejo Permanente de la OEA en Washington D.C, fue el más complejo de la historia política dominicana a través de 15 elecciones en 54 años. Como razones para ello, tenemos el hecho de que se trató de la primera vez desde 1994 que en un mismo día se escogían todas las posiciones electivas. Anteriormente, nuestro sistema tenía menos provincias y municipios, no existían los 231 Distritos Municipales, no había voto desde el exterior, no existían las circunscripciones electorales además de que los integrantes de la Cámara de Diputados se escogían por lista cerrada en lugar del voto preferencial. Junto con ello, se buscó aplicar por primera vez el conteo electrónico del voto. Todo esto representó un reto que dificultó la realización de lo que estaba supuesto a ser una fiesta de la democracia. 

El Presidente Pastrana reiteró en Washington las recomendaciones que ya había hecho en Santo Domingo. Entre ellas, buscar un verdadero voto directo para el Congreso Nacional, lo que actualmente se encuentra impedido por el método de elección de voto único transferible entre candidato a Diputado y al Senado. Al mismo tiempo, mejoras en el acceso a los medios de comunicación para los distintos actores políticos y revisión del método de repartición de fondos públicos para los partidos políticos así como regulaciones a los aportes privados.

Como candidato en cinco elecciones consecutivas, debo decir que lo plasmado en el Informe Pastrana, lo que hace es mayormente recopilar las preocupaciones de la ciudadanía dominicana sobre nuestro sistema. Personalmente, he escuchado la queja de un alto número de electores que no entienden la razón por la que su voto al Congreso debe ir a otros candidatos que muchas veces no son los de su simpatía. Y no hay que entender esto, lo que procede es cambiarlo de forma tal que el derecho a elegir y ser elegible pueda ser verdaderamente respetado en el país como lo manda nuestra Constitución. Mientras tanto, lo que se hace es contribuir a una representación desbalanceada de los cuerpos legislativos.
 
En cuanto a la presencia en los medios de comunicación, esta vez quizá más que las anteriores, se notó una desigualdad sorprendente. La posible solución a ello es debatible, pero el modelo chileno de las franjas electorales siempre ha parecido interesante al ayudar a equilibrar esta parte importante de la competencia política. Es un modelo que vale la pena estudiar para República Dominicana sin dejar de tomar en cuenta las particularidades de nuestra propia realidad. 
 
Sobre el financiamiento, actualmente, el sistema que usamos se encuentra inspirado en el estadounidense que entrega fondos mayoritarios a los partidos que sobrepasen el umbral del 5% de los votos, lo que tras las recientes elecciones ascenderá a cuatro partidos políticos. Otra similitud es que además se permiten los aportes privados por encima del financiamiento público. Pero la gran diferencia está en que por un lado, la rendición de cuentas o establecimiento de criterios sobre los fondos públicos es escasa por no decir inexistente, y no hay ningún tipo de regulación sobre los aportes privados. Esto es muy preocupante pues en lugar de ser una competencia principalmente basada en propuestas, pone el dinero en el centro lo cual resulta nocivo para la salud democrática de cualquier país. 
 
Desde mi posición como Diputado, comenzando con los fondos públicos, he propuesto en varias ocasiones el reducir los aportes que los partidos políticos reciben en años no electorales. De esta forma, no solo reducimos el riesgo de que la administración de un partido se vuelva un negocio personal, sino que también se dedican esos fondos a inversión más productiva para la ciudadanía y el país. También hemos propuesto reiteradamente el establecimiento de criterios sobre dicha administración puesto que en la actualidad, esto queda a la voluntad de unos pocos o a veces de una sola persona, lo que inclina la balanza a favor de los más cercanos a la directiva de turno, la que pocas veces se renueva ante la ausencia de un adecuado Código Electoral que incluya Ley de Partidos y Reforma Electoral amplia.

Lo dicho en el informe Pastrana, nuevamente traído al centro de debate al presentarse en el Consejo de la OEA, no debe solo quedar en los encabezados de la semana. Son temas serios que merecen un debate profundo para que en el 2020 podamos tener un proceso con la confianza de todos los sectores. Gran parte de las fallas vistas este año se debieron a la ausencia de leyes y reglamentos a aplicar. Es hora entonces de actuar para corregir esta realidad que en lugar de fortalecer, hace retroceder nuestra democracia. Siendo uno de los países con más elecciones celebradas en este medio siglo, toca pasar de la cantidad, a la calidad.
 

// OTROS TEMAS QUE TE PUEDEN INTERESAR

// EN PORTADA

// LO MÁS LEÍDO

// MÁS DEL AUTOR/A

Menú